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Los animales fueron distribuidos en cuatro tratamientos distintos con dos tipos de proteína (concentrado de soja, CS; y plasma desecado, PD) y dos niveles de EM (3,523 vs. 3,323 Mcal/kg). Las cuatro dietas tenían 1,35% de lisina digestible y estaban fabricadas con maíz, soja, suero de leche, lactosa y harina de pescado. Se sacrificaron dos lechones por tratamiento los días 0, 3, 7 y 14 para tener medidas de sus órganos digestivos.
El crecimiento del páncreas, estómago e intestino delgado estaba altamente correlacionado con el PV (r>0,85; p<0,01) y con la edad (r2>0,70; p<0,01). El día 7 el peso del intestino delgado era inferior (p<0,05) en los lechones que recibían PD en lugar del CS y el día 14 el peso del intestino y el estómago eran inferiores en los lechones que recibían PD (p<0,05). No se detectaron interacciones con el nivel de EM.
Estos resultados sugieren que la fuente de PB y no el nivel de EM puede afectar de forma dramática el desarrollo del estómago y el intestino delgado; El CS de algún modo puede conservar todavía un cierto poder antinutritivo. Además también parece que el PV puede ser usado para predecir el peso del páncreas, estómago y del intestino delgado en los lechones destetados precozmente.
T. Buhay, S. Carter, R. Cueno, M. Lachmann, J. Park y J. Schneider 2005. J. Anim. Sci. Vol. 83, Suppl. 1 Ref. T122
